Cuando nosotras como mujeres entendamos que somos merecedoras de amor y afecto, que siempre somos suficientes, que somos un diamante y que somos la gema más preciosa que existe en la creación de Dios, entenderemos que valemos muchísimo más.
Hoy a través de este artículo, quiero invitarte a que la próxima vez que te mires en un espejo, lo hagas con la convicción de lo valiosa que eres como persona. Todas somos una perfecta creación de Dios, a pesar de que a veces no nos damos el valor, debemos comenzar a amarnos, respetarnos, valorarnos y querernos por sobre todas las cosas, tal cual somos.
Desde mi experiencia, fui a lo largo de 4 años y medio, una estudiante de la Academia Militar De La Armada, logrando de ésta manera estar a la par de aquellas órdenes emitidas por oficiales masculinos. Esta situación propició el fortalecimiento de mi personalidad, la planificación en todos los aspectos, y especialmente entendí lo que es la disciplina. Logré de esta manera garantizar habilidades como la adaptabilidad, ante cualquier situación, y lograr una visualización positiva para mentalizarme en pro de alcanzar todo objetivo o sueño que aspiro lograr.
Una mujer empoderada debe contar con la seguridad necesaria que le permita desenvolverse ante cualquier situación que se le presente, teniendo la capacidad suficiente de resolver problemas con eficacia. Entendamos que el empoderamiento del género femenino en la actualidad es totalmente inclusivo, pues nos motiva hacia la participación de lograr un espacio dentro de la sociedad.
Venezuela, tiene nombre de mujer y estoy absolutamente convencida que tenemos que seguir aportando con mucho vigor y energía positiva nuestro trabajo, estudio y talento en pro de desarrollar una nación de gran potencia en el mundo, partiendo siempre desde nuestro ser.
"Recuerda que empoderamiento es sinónimo de hacernos fuertes y hacernos poderosos"