Algunas personas ven los obstáculos como una puerta que se abre, otras eligen verlos como una excusa para justificar una vida triste. ¿Qué tipo de persona eres tú?

La mayoría de nosotros nos hemos sentidos estancados o paralizados en algún momento de nuestras vidas. En muchas ocasiones esto se debe a variables externas, o piedras que la vida pone en nuestro camino para retarnos. Y si bien es cierto que la adversidad pone en cuestión nuestro carácter y habilidad para sobrepasar situaciones complicadas, no debemos permitir que estas piedras nos impulsen a tomar un papel de víctima ante la vida.

La felicidad la alcanzan aquellos que deciden construir un puente para seguir avanzando a pesar de las piedras que bloquean su camino; aquellos que ven la vida desde una perspectiva diferente porque así se lo han propuesto; aquellos que entienden que tomar una actitud positiva y proactiva ante una situación que no pueden controlar, determina el aprendizaje que se llevan de dicha situación. ¡Y qué liberador es saber que tienes el poder de escribir tu propia historia y que no eres esclavo de un supuesto destino prescrito! ¡Eres el arquitecto de tu propia felicidad!

A medida que tomas decisiones que te ayudan a dejar atrás el papel de espectador y te motivan a convertirte en el actor principal de la novela de tu vida, más capaz, libre y dueño de tu destino te sentirás. 

Te reto a que de ahora en adelante veas los obstáculos como motores que te impulsan a crecer y adaptarte al cambio. Recuerda que la vida es lo que hacemos de ella y que la actitud que decidas tomar ante la adversidad, te permitirá abrir puertas en las paredes que una vez te bloquearon el camino.